Durante las fases de brote de la enfermedad de Crohn y la colitis
ulcerosa, las restricciones en la dieta son necesarias debido a la
inflamación.
Pero a medida que el tratamiento va haciendo efecto y
la inflamación se reduce, es importante introducir de manera progresiva
los alimentos que se han suprimido durante el brote, para mejorar su
tolerancia y recuperar un buen nivel nutricional.
Los pasos generales a seguir serían los siguientes:
1. Consumir alimentos fáciles de digerir y ricos en hidratos de carbon.
2. Si se ha tolerado bien el primer paso, introducir algunos vegetales y proteínas cocinadas con poca grasa (al vapor/hervido).
3. Incorporar lácteos y sus derivados, embutidos poco grasos y cocinar al horno, a la plancha o a la parrilla.
4. Probar algunas verduras en pequeñas cantidades y otros alimentos, y
comprobar la tolerancia personal hasta lograr una dieta lo más
normalizada posible.
Además es importante distribuir las comidas
en 5-6 tomas diarias y en pequeñas cantidades, tener una buena
hidratación y evitar las bebidas muy frías o muy calientes y masticar
bien los alimentos para mejorar su digestión.
Fuente: educainflamatoria.com