La enfermedad de Crohn en la infancia tiene unas características peculiares respecto a la de los adultos. Por lo general suele ser más extensa, con mayor afectación del colon y presenta una peor respuesta al tratamiento.
Si la enfermedad no se controla de manera efectiva puede afectar significativamente al crecimiento, retrasar el desarrollo y la maduración sexual y provocar secuelas a nivel emocional.
Por lo que el tratamiento se ha de orientar a controlar la enfermedad, a recuperar el crecimiento y a prevenir posibles recaídas y complicaciones. En edad pediátrica la terapia con nutrición enteral exclusiva proporciona buenos resultados para lograr la remisión y mejorar el crecimiento. Mientras que en enfermedades activas de moderadas a graves, las terapias biológicas están siendo útiles para controlar la sintomatología y mantener la remisión.
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Fuente: saludymedicina.org 18/07/2015
