La sanidad del siglo XXI está inmersa
en profundos cambios no sólo por el nuevo perfil de los pacientes
(mayores, crónicos, polimedicados, con dependencia), sino también por
los cambios organizativos y por la aparición
de potentes herramientas farmacoterapéuticas. Este es el caso de los
medicamentos biológicos, capaces de conseguir que enfermedades hasta
ahora mortales pasen a ser patologías crónicas.
Así lo ha publicado
Redacción Médica. 26/10/2015