Numerosas enfermedades autoinmunes se caracterizan por la presencia de
linfocitos B autorreactivos con capacidad para reconocer antígenos
propios y ocasionar daños en los tejidos del individuo. Nuestro sistema
inmunitario tiene diversos mecanismos para eliminar
estas células autorreactivas que pueden ocasionar el desarrollo de
enfermedades autoinmunes.
Un estudio con participación del Consejo
Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y publicado en la revista
Nature Immunology desvela un regulador clave en este
proceso. Según los resultados de este trabajo, el aumento de expresión
de la molécula micro ARN 148a (miR-148a) facilita la supervivencia de
linfocitos B autorreactivos, que deberían ser eliminados, según informa
el CSIC en una nota de prensa.
Así lo ha publicado
La Razón.